Gran sorpresa por las revelaciones que realizó Mike Tyson sobre la pelea con Jake Paul
En sus primeras declaraciones públicas tras el combate con el youtuber americano, el boxeador dejó atónitos a sus seguidores.
- Volanta: Boxeo
Mike Tyson, el excampeón mundial de peso pesado y una de las figuras más emblemáticas del boxeo, dejó a todos sorprendidos con sus declaraciones tras su reciente pelea contra Jake Paul en noviembre. En una entrevista con Fox Sports Radio, Tyson reveló que no recuerda casi nada de lo sucedido durante el combate, y afirmó: “Me bloqueé”. El combate, realizado en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, terminó siendo un gran fracaso para Tyson, quien fue superado ampliamente por Paul, quien se llevó la victoria por decisión unánime con puntuaciones de 80-72, 79-73 y 79-73. Esta victoria permitió a Jake Paul mejorar su récord a 11-1.
Lo que más sorprendió no fue tanto el resultado, sino la confesión de Tyson. En sus primeras declaraciones públicas tras la pelea, admitió que los recuerdos de esa noche eran borrosos, y que la última imagen que tiene de la pelea es de Jake Paul haciendo una extraña reverencia al finalizar el primer asalto. "Recuerdo regresar después del primer round y Jake estaba haciendo algún tipo de... no sé qué estaba haciendo, como una especie de reverencia", dijo Tyson, aún desconcertado. Además, cuando se le preguntó sobre la potencia de los golpes de Paul, Tyson respondió: "No recuerdo eso", aunque mencionó que al día siguiente despertó con fuertes dolores en el pecho y el estómago.
El desempeño de Tyson fue tan irregular que rápidamente comenzaron a circular rumores sobre un posible arreglo de la pelea. Algunos señalaron que en ciertos momentos Tyson esquivó golpes de una manera inusual, lo que alimentó teorías conspirativas. Sin embargo, Tyson salió al paso de estas especulaciones y dejó claro que fue una pelea real, desmintiendo cualquier posibilidad de que hubiera sido un espectáculo pactado.
Más allá de las controversias sobre su rendimiento, Tyson reveló que su mayor desafío ocurrió fuera del ring. En los meses previos al combate, estuvo muy cerca de la muerte debido a complicaciones graves de salud. “Casi muero en junio, tuve ocho transfusiones de sangre. Perdí la mitad de mi sangre y 25 libras mientras estaba hospitalizado”, explicó Tyson. A pesar de este dramático episodio, decidió subir al ring para cumplir el sueño de que sus hijos pudieran verlo pelear en un gran escenario, algo que no ocurrió durante su carrera en su mejor momento.
A pesar de la derrota y sus problemas de salud, Tyson adoptó una perspectiva positiva sobre su experiencia. “Esta es una de esas situaciones en las que pierdes, pero aun así ganas”, reflexionó, agradeciendo la oportunidad de pelear frente a un estadio lleno de fanáticos. Jake Paul, quien se llevó la victoria, también mostró respeto por Tyson, elogiando su legado y calificándolo de "inspiración" a través de un mensaje en sus redes sociales.
Aunque Tyson no logró el resultado esperado en su última pelea, su legado como uno de los más grandes boxeadores de la historia sigue intacto. Su última aparición en el ring no solo será recordada por el resultado del combate, sino también por la revelación de una batalla más profunda: la lucha personal de un hombre que, a pesar de enfrentarse a sus propios límites y problemas de salud, decidió despedirse del deporte que lo hizo leyenda.