"No se equivoquen, con nosotros nunca podrán": la respuesta del gobierno
Luego de que el narcoterrorismo amenazara con armas de guerra a Patricia Bullrich, el Gobierno nacional respondió a las advertencias de los criminales y afirmó: “No se equivoquen, con nosotros nunca podrán”.
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En un video difundido en redes sociales, integrantes de bandas narcos amenazaron a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich y al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, mientras exhibían armas como subfusiles FMK3, una pistola Glock, un FAL y una escopeta calibre 12. En las imágenes aseguran: “Esto nunca se va a terminar”.
El Gobierno, a través de un comunicado, confirmó que trabaja con las autoridades santafesinas para identificar a los responsables y envió un mensaje claro: “No se equivoquen, con nosotros nunca podrán. En la Nueva Argentina no hay espacio para la violencia armada. Si proceden, serán enfrentados con todo el peso de la ley”. El presidente Javier Milei replicó el mensaje en redes, agregando: “El crimen no paga ni pagará jamás en nuestro gobierno. No será rentable ser delincuente. El que las hace las paga”. Patricia Bullrich también respaldó el comunicado.
El Gobierno calificó el video como “una amenaza terrorista” y destacó que su doctrina de seguridad, basada en “el que las hace, las paga”, ha logrado reducir un 80% los homicidios en Rosario y golpear las finanzas del narcotráfico. Reafirmaron su compromiso de “tolerancia cero” contra el crimen organizado y el terrorismo, garantizando el apoyo total a las fuerzas de seguridad e inteligencia para enfrentar estas amenazas.
En el video, los encapuchados acusan a las autoridades de “armar todo para darle más poder a su banda” y reclaman por “trabajos y escuelas”. Amenazan con “dejar muertos por toda la capital de Buenos Aires y Santa Fe” mientras levantan sus armas. Según fuentes oficiales, aunque las FMK3 eran frecuentes entre estos grupos, no se habían visto desde 2023, mientras que el FAL registrado corresponde a una versión diseñada para paracaidistas, indicando un incremento en el poder de fuego del narcoterrorismo.