Graciela, para mi hijo Fernando Báez Sosa: " Tu mamá y tu papá no te olvidan”
Para los padres de Fernando, desde hace cinco años, cada 18 es un recordatorio de un mes más sin su hijo y de los sueños que quedaron truncos.
Hace cinco años, en enero de 2020, Silvino y Graciela Báez Sosa despidieron a su único hijo, Fernando, que se fue a vacacionar a la Costa Atlántica con sus amigos. Una semana más tarde, el matrimonio recibió la peor noticia: el joven de 18 años murió tras una golpiza salvaje a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell.
Desde aquel día, el caso Báez Sosa se convirtió en uno de los más emblemáticos de la historia policial reciente de nuestro país. La muerte de Fernando, por algún motivo, estremeció como pocos a la opinión pública y pasó a ocupar un lugar significativo para los argentinos, quienes vieron en este adolescente a uno de sus hijos o hermanos. Para pedir “justicia” hubo desde marchas multitudinarias, pasando por colectas solidarias hasta una placa a metros de la discoteca donde lo asesinaron a golpes.
Para los padres de Fernando, desde hace cinco años, cada 18 es un recordatorio de un mes más sin su hijo y de los sueños que quedaron truncos. “Este año se recibiría de abogado”; “Hoy Fer cumpliría 23 años”. Graciela lleva el conteo y suele compartirlo en sus redes sociales. El apoyo del otro lado es absoluto: cada publicación tiene cientos de comentarios y miles de “Me gusta”.
Desde que le arrebataron la vida a patadas a su hijo, los Báez Sosa se refugian en sus afectos y en la fe. Para este sábado, además de recibir a algunos familiares de Paraguay —de donde son oriundos— Silvino y Graciela organizaron una misa en memoria de Fernando. La ceremonia se llevará a cabo hoy a las 19.30 horas en la parroquia Santísimo Redentor, ubicada en Larrea 1252. “Los invitamos a acompañarnos en este día tan difícil para nosotros”, dice el flyer que vienen compartiendo en sus estados de WhatsApp desde hace semanas.
Las semanas previas a este quinto aniversario tampoco fueron fáciles. Consultada, Graciela cuenta: “Estoy un poco bajoneada. Mañana, 10 de enero, Fernando salió de casa rumbo a la costa”, le dice a este medio. Unos días después, en otro intercambio, contó: “Voy a escribirle una carta. Hay tantas cosas que quisiera decirle a Fer...”.
El texto, escrito de puño y letra, en cursiva, arranca así:
“Para mi hijo Fernando Báez Sosa. Al cumplirse 5 años de tu asesinato me pongo a escribirte pensando en todos los bellos momentos compartidos a tu lado que jamás nadie podrá arrancar de nuestro corazón. Con tu partida también perdimos nuestra vida porque sin vos nada es igual. Fuimos tan felices. Nos hiciste sentir orgullosos con todos tus logros que conseguiste con tanto sacrificio para ingresar a la facultad de Derecho. Fuiste y serás siempre un buen hijo, alegre, con tu hermosa sonrisa, siempre dispuesto a ayudar a los demás. A veces miramos videos tuyos para verte y escuchar tu voz y terminamos con unas lágrimas que quisiéramos retroceder el tiempo para abrazarte y no dejarte ir nunca”.
Y se despide: “Te extraño tanto Fer. Extraño todo de vos. Todas las noches espero encontrarte en mis sueños, que me abraces fuerte y me digas: ‘Má, ya llegué’. Pero me despierto a sabiendas de que no va a suceder. Hasta pronto hijo mío. Mi gran abogado que nos da luz para seguir luchando para conseguir ‘justicia’. Te amamos y amaremos por siempre. Descansa en paz Fer. Tu mamá y tu papá no te olvidan”.
La magnitud que cobró el caso fue tal que, tres años después del crimen, en pleno juicio oral, más de 95 mil personas se conectaron al canal de YouTube de la Suprema Corte bonaerense para ver cómo el Tribunal N°1 de Dolores condenaba a sus asesinos: cinco de ellos —Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Ciro y Luciano Pertossi— recibieron perpetua por ser coautores del crimen; los otros tres —Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi— al ser considerados partícipes secundarios, 15 años de prisión.