El baby shower no va más: ésta es la nueva moda
Padres agradecidos y amigos comprometidos: así funciona el nuevo ritual de la bienvenida.

- Volanta: Tendencias
Durante años, el baby shower fue el evento por excelencia para celebrar la llegada de un bebé. Globos, regalitos y decoración pastel eran parte infaltable de estas reuniones que copiaban una costumbre nacida en Estados Unidos. Pero como todo en la vida, los tiempos cambian, y con ellos también las formas de celebrar.
Lo que empezó como una celebración terminó muchas veces siendo una carga extra para los futuros padres, que debían ocuparse de la organización justo cuando sus energías estaban enfocadas en la llegada del bebé. Las críticas crecieron y, en pleno auge de lo simple y genuino, surgió un cambio rotundo impulsado por las redes sociales.
Bienvenido, pero con ayuda real
La nueva tendencia, que gana fuerza en Argentina, propone posponer la celebración hasta después del nacimiento. ¿El motivo? El foco ya no está en los regalitos ni en las selfies, sino en acompañar con acciones concretas: cocinar, ordenar, limpiar y hasta cuidar al recién nacido mientras los padres descansan un rato.
Conocido informalmente como “post-baby shower”, el evento no tiene guion ni decoración temática. Se organiza entre amigos cercanos o familiares que, en lugar de visitar solo para conocer al bebé, van preparados para ayudar en tareas del hogar, traer viandas o simplemente acompañar. Una forma de demostrar amor a través de gestos reales.
Celebrar desde otro lugar
Esta forma de celebrar pone en el centro una idea que parece sencilla pero que lo cambia todo: acompañar en lugar de adornar. En lugar de ser un evento para las redes, se convierte en un momento íntimo y transformador, donde cada gesto tiene un valor inmenso. Una moda emocional, que lejos de desaparecer, llegó para quedarse.