Trump cuestionó la respuesta de la torre de control tras el choque aéreo
El presidente estadounidense, criticó la gestión del accidente aéreo en Washington, mientras los equipos de rescate buscan sobrevivientes tras la colisión entre un avión comercial y un helicóptero militar.
- Volanta: ¡No es bueno!
Un grave accidente aéreo ocurrió en Washington D.C. cuando un avión comercial que transportaba 64 personas colisionó en el aire con un helicóptero militar. El vuelo, identificado como American Eagle 5342, se encontraba en ruta desde Wichita, Kansas, hacia el Aeropuerto Nacional Reagan, cuando, tras la colisión, el avión cayó al río Potomac.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se pronunció sobre el incidente, cuestionando la respuesta de la torre de control y el accionar del piloto del helicóptero. En su plataforma Truth Social, Trump expresó su preocupación por la forma en que se manejó la situación. “Esta es una situación grave que parece que debería haberse evitado”, sostuvo el mandatario. Trump fue muy claro al referirse a los momentos previos a la colisión, destacando que el avión estaba en una “línea de aproximación perfecta y rutinaria al aeropuerto”. Según el presidente, el helicóptero estuvo durante un largo período de tiempo dirigiéndose directamente hacia el avión, sin tomar ninguna maniobra evasiva.
“Es una noche despejada, las luces del avión estaban encendidas, ¿por qué el helicóptero no subió, bajó o giró? ¿Por qué la torre de control no le indicó al helicóptero qué hacer en lugar de preguntarle si veía el avión?”, se preguntó Trump, con un tono crítico y preocupado. El presidente se mostró visiblemente molesto por la falta de acción ante lo que consideró una situación evitable. En su mensaje, Trump concluyó: “¡NO ES BUENO!”, dejando en claro su desaprobación ante la respuesta de las autoridades involucradas.
Además, Trump había mostrado su apoyo a los equipos de emergencia poco después de conocerse la noticia del accidente. “Me han informado detalladamente sobre el terrible accidente que acaba de ocurrir en el Aeropuerto Nacional Reagan. Que Dios bendiga sus almas", dijo en un comunicado oficial desde la Casa Blanca.
Investigación y Rescate Tras el Accidente
El accidente, que dejó a las autoridades y equipos de emergencia en alerta, aún no tiene información confirmada sobre el número de víctimas. El senador Roger Marshall, de Kansas, mencionó en redes sociales que a bordo del avión había 60 pasajeros y cuatro tripulantes, calificando el accidente como una “pesadilla”. Además, un oficial del Ejército de Estados Unidos indicó que el helicóptero Blackhawk involucrado en el choque transportaba a tres militares, aunque no se dieron detalles sobre su estado de salud.
En respuesta al accidente, el Aeropuerto Nacional Reagan suspendió todos los despegues y aterrizajes. El Departamento de Seguridad Nacional desplegó recursos de la Guardia Costera para apoyar las operaciones de búsqueda y rescate. Equipos de policía y bomberos llevaron a cabo una intensa operación en el río Potomac, con helicópteros sobrevolando la zona y rastreando el agua en busca de sobrevivientes.
El tráfico aéreo en la zona fue afectado por el incidente, con registros de controladores aéreos que documentaron la falta de comunicación antes del impacto. Menos de 30 segundos antes de la colisión, un controlador aéreo preguntó al helicóptero si visualizaba el avión: “PAT25, ¿tienes al CRJ a la vista?”. Sin embargo, no hubo respuesta del helicóptero antes del choque. El avión, un Bombardier CRJ700, volaba a 122 metros de altitud y a una velocidad de 225 kilómetros por hora cuando perdió altura y cayó abruptamente en el río.
El accidente