De cuánto fue el increíble patrimonio que dejó el Papa Francisco
Mientras muchos imaginaban millones, la realidad fue otra: Bergoglio falleció con una cuenta casi vacía. Su vida fue testimonio de austeridad.

- Volanta: Vida sin lujos
Mientras el mundo despide al papa Francisco, una revelación sobre su vida privada genera asombro y admiración: al momento de su fallecimiento, el pasado 21 de abril, el líder de la Iglesia Católica tenía en su haber apenas 100 dólares. Un dato que, aunque pueda parecer insólito, refleja con precisión su filosofía de vida: austeridad, humildad y desapego total de lo material.
El pontífice más influyente murió con menos dinero que muchas personas comunes. Pero detrás de ese número, hay una historia coherente y poderosa.
Un papa distinto desde el primer día
Desde su llegada al Vaticano en 2013, Jorge Mario Bergoglio rompió con las tradiciones más opulentas del papado. Renunció a los históricos apartamentos pontificios del Palacio Apostólico y se instaló en la Casa Santa Marta, una residencia modesta utilizada normalmente por sacerdotes de paso.
Su mensaje era claro: "la Iglesia debe estar cerca de los pobres", y su estilo de vida fue el primer testimonio. Viajaba en autos usados, vestía con sobriedad y evitaba cualquier tipo de lujo, incluso en actos oficiales. No era marketing, era convicción.
Nunca acumuló bienes, ni buscó el poder terrenal. Mientras otros pontífices vivían rodeados de arte, mármol y oro, él optaba por la sencillez del día a día.
"Vivir con poco es vivir con libertad", fue uno de sus principales lemas.