Hugh Jackman reveló los detalles de su intensa rutina de entrenamiento para su papel en "Deadpool & Wolverine"

Al retomar su famoso rol del mutante de garras afiladas en Deadpool & Wolverine, Hugh Jackman lo hizo con la mejor forma física de su carrera. El actor australiano de 55 años reapareció con un cuerpo tonificado que fue resultado de meses de intenso entrenamiento, una estricta dieta y un equipo detrás de cámaras comprometido en hacer que sus músculos resaltaran aún más en la pantalla. A través de sus redes sociales, Jackman compartió pormenores de su transformación física para la película y agradeció a las personas que lo ayudaron a lograr su impactante look. “Mucha gente me ha preguntado cómo me puse en forma, cómo entrené, y cuán difícil es a mi edad. Solo quería tomar un segundo para decir que sí, tuve que esforzarme al máximo con esos levantamientos y esa dieta. Pero no habría llegado allí sin mi equipo. No lo hubiera hecho solo” expresó en un mensaje de voz que lanzó acompañado de una fotografía de su torso. El actor destacó en especial el papel de Beth Lewis, su entrenadora personal, quien lo ha acompañado en sus procesos de acondicionamiento físico durante los últimos cinco años. Ella no solo lo preparó para la tercera película de la franquicia Deadpool, sino también para otros proyectos como su reciente gira teatral en The Music Man. Al trabajar con Lewis, Jackman resaltó que no sobrecargó su cuerpo. “Me ayudó a comprender que me estaba exigiendo demasiado en el pasado. Beth nunca me hizo trabajar en exceso”, explicó. Para lograr el físico de superhéroe que los fanáticos de Marvel esperaban, Hugh siguió un régimen que incluía la ingesta de más de 8.000 calorías diarias. La dieta —diseñada para maximizar el crecimiento muscular— estaba basada principalmente en proteínas magras como pollo, tilapia y frijoles. Esa dieta, combinada con un régimen de levantamiento de pesas intenso, le permitió a Jackman ganar una cantidad significativa de masa muscular en los seis meses previos al inicio del rodaje. “Aprendí que no puedes apresurar el proceso”, dijo en una entrevista. Además del componente nutricional y el ejercicio físico, el equipo de producción de Deadpool & Wolverine empleó varias técnicas para que el cuerpo de Logan se viera aún más impresionante al ser captado por la cámara. “Mi maquilladora, Whitney James, fue clave para hacer que mi físico se viera aún mejor.  Le pedían que me aplicara aceite para que mi piel brillara”, comentó Jackman en la nota de voz enviada a sus redes sociales. “Durante el rodaje, era común escuchar al director Shawn Levy gritar: ‘¡Lubricante fresco para Hugh!’ Todos se reían”, recordó el actor. Segun Variety, se empleó mucho de ese líquido para el rodaje de una de las escenas cumbre de la película, cuando la dupla de amigos-enemigos luchan en una sala de máquinas para frustrar el plan malvado de Cassandra Nova. “Ese día fue especialmente difícil porque estaba de mal humor. No había tomado agua la noche anterior y llevaba días comiendo tilapia y frijoles para mantenerme en forma”, explicó Jackman sobre la escena.