De madre joven a participante de Gran Hermano: La historia de La Tana
Katia Fenocchio compartió cómo la maternidad a temprana edad cambió su vida y la llevó a estar donde está hoy. Una historia de amor, sacrificio y superación.

- Volanta: Superación y fortaleza
Dentro de la casa de Gran Hermano, Katia Fenocchio, más conocida como La Tana, dejó atrás su personaje de juego y reveló un lado muy personal de su vida: su maternidad adolescente. Con una charla sincera junto a Lourdes Ciccarone y Gabriela Gianatassio, La Tana compartió cómo, a los 16 años, quedó embarazada y cómo enfrentó el rechazo de su padre y el desdén de parte de su familia.
El rechazo familiar y la lucha por salir adelante
Katia recordó que cuando le contó a su madre que iba a ser madre a los 17, ella la apoyó, pues había vivido una experiencia similar. Pero el padre de La Tana reaccionó con rechazo y le advirtió que tendría que “sacar una familia adelante como sea”. Las dificultades económicas no tardaron en llegar, y a menudo tuvo que recurrir a ropa reciclada, utensilios usados y el apoyo de su madre para criar a su hija.
Una historia de resiliencia
Hoy, a pesar de haber atravesado tantas dificultades, Katia se siente más fuerte. Asegura que su hija adolescente es su mayor fuente de inspiración y que, incluso en los momentos más oscuros, nunca dejó de luchar.
En Gran Hermano, aunque a veces se siente vulnerable, sigue adelante para demostrar que, incluso en las situaciones más duras, el amor y la resistencia son formas de fortaleza.