Se han contabilizado hasta ahora 16 muertos, pero la búsqueda continua y son miles los evacuados. Se han derrumbado puentes, casas, cortado rutas, tras la caída de 300 milímetros de agua en solo 12 horas. Vialidad Nacional informó que hay cortes totales para la circulación en dos rutas nacionales, la 3 y la 35.

Y así como lamentablemente se registraron saqueos, también hubo actos heroicos como el del transportista Rubén Zalazar, que intentó rescatar a las hermanas Delfina y Pilar Hecker y a su madre del auto en el que estaban atrapadas, pero el agua los arrastró a todos. El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, confirmó la aparición del cuerpo sin vida del chofer a 150 metros de donde la mamá de las nenas logró ser rescatada del agua. Continúa la búsqueda de las niñas.

Otro acto heroico fue el de doce mujeres que trabajan en neonatología del Hospital Penna,  empapadas y solo con la luz del celular rescataron a los recién nacidos del subsuelo donde estaban. De allí los llevaron con sus madres, para recibir calor corporal. Después, una odisea de seis kilómetros en tres vehículos a otro hospital.

Es tan grande la tragedia que vive Bahía Blanca que el gobierno nacional dispuso tres días de duelo por los fallecidos y una partida especial de 10.000 millones de pesos para ayuda.

Pero la bien reconocida solidaridad de los argentinos se pudo ver enseguida, masivas donaciones en iglesias, clubes, estaciones de trenes, ONG y hasta clubes de futbol, se han transformado en centros de acopio donde se reciben alimentos no perecederos, agua potable, ropa, calzado, colchones y ropa de cama, artículos de higiene personal y elementos de limpieza para brindar apoyo a los damnificados.

Por la televisión porteña pudimos ver, reflejado en las pantallas, el extraordinario movimiento de solidaridad. Esto sucede en Buenos Aires, pero todo el país se moviliza para prestar ayuda, donaciones que, aún siendo mínimas, son de gran importancia en estos difíciles momentos.

El ejército colabora en las tareas de rescate y de remoción de los escombros, con un amplio operativo. La ministra de seguridad Patricia Bullrich, viajó el mismo sábado 8 y recorrió las áreas más afectadas, estaba previsto que regrese hoy a Bahía Blanca. El presidente Javier Milei, suspendió su presentación en la fiesta de la vendimia en Mendoza para sobrevolar la zona de desastre.

¿Se pudo prevenir esta catástrofe? Indudablemente no, fue un fenómeno meteorológico excepcional, imposible de prever, Pero hay que estar muy atentos, porque el cambio climático, el que muchos niegan, puede generar meteoros similares en cualquier geografía. Hay que mejorar la infraestructura que aminore los efectos de un temporal como el de Bahía Blanca.

No se puede culpar al gobierno nacional por las carencias en este sentido, lleva solo un año y meses en el gobierno, pero el Gobernador Kicillof lleva más de 5 años, al frente de la provincia y debió, en lugar de malgastar los recursos en actos demagógicos como el pagar viajes estudiantiles, dedicar estos fondos a mejorar la infraestructura de la provincia..