Habilitarán pagos en dólares dentro del país con tarjetas de débito

En los próximos días, el Banco Central de Argentina presentará una nueva normativa que habilitará el uso de tarjetas de débito para realizar pagos en dólares dentro del país, una opción que hasta el momento solo estaba disponible para compras fuera de las fronteras argentinas. La principal intención de esta medida es promover el gasto de los dólares acumulados en las cuentas bancarias, estimular las transacciones comerciales y reactivar el consumo, especialmente en productos duraderos.

Gracias a esta medida, los consumidores podrán realizar pagos en dólares en diversos comercios habilitados, que incluyen tanto cadenas de electrodomésticos como concesionarios de vehículos usados. El periodista especializado en economía, Fernando Meaños, señaló que “el gobierno busca que productos como televisores, heladeras o autos usados, cuyos precios suelen fijarse en dólares, puedan pagarse directamente en esa moneda”.

Este nuevo mecanismo simplificaría los procesos de compra, ya que eliminaría la necesidad de convertir pesos a dólares y reduciría los problemas derivados de las fluctuaciones del tipo de cambio. Según Meaños, “El precio estará en dólares y se debitará directamente desde la cuenta en esa moneda, sin operaciones cambiarias intermedias”.

Tecnología y decisión voluntaria de los comercios

Compañías como Visa, Mastercard y proveedores de terminales de punto de venta, como Payway, ya han comenzado a preparar la infraestructura tecnológica necesaria para que esta modalidad de pago sea viable. Sin embargo, la implementación de la normativa será opcional para los comercios, que decidirán si les resulta conveniente adoptar este sistema. Se espera que el nuevo modelo sea especialmente atractivo para aquellos negocios que venden productos de alto valor.

Argentina ha experimentado una considerable acumulación de dólares en el sistema financiero, gracias a las políticas de blanqueo de capitales y las restricciones sobre el otorgamiento de créditos en dólares. Como explicó Meaños, “Ingresaron casi 21.000 millones de dólares en efectivo al sistema financiero, pero los bancos no siempre encuentran a quién prestárselos”.

La nueva normativa tiene como objetivo canalizar esos fondos hacia el consumo directo, beneficiando tanto a los consumidores como a las empresas. De este modo, el gobierno busca reactivar la economía real y fortalecer sectores productivos, particularmente las pequeñas y medianas empresas (pymes).

Uno de los beneficios más destacados para los consumidores es la mayor transparencia en los precios, ya que no dependerán de la variabilidad de las tasas de cambio al momento de efectuar sus compras. No obstante, la medida podría ser un desafío para los pequeños comercios que no están acostumbrados a manejar precios en divisas extranjeras. “Probablemente no será atractivo para un almacén de barrio, pero sí para negocios enfocados en bienes duraderos”, agregó Meaños.

Impacto esperado en el comercio y la economía

Con esta iniciativa, el gobierno espera incentivar el consumo, particularmente en sectores que han visto una demanda limitada. Según Meaños, la medida busca “alimentar la actividad de pequeños comercios, pymes y otros sectores empresariales que necesitan un impulso”. Además, esta normativa coincide con el inicio de campañas comerciales de grandes cadenas de electrodomésticos y empresas de tarjetas de crédito, lo que aumenta el interés en esta nueva modalidad de pago.

Para finalizar, Meaños concluyó: “El gobierno no quiere esperar más para implementar un sistema que promete dinamizar tanto el comercio como la economía en general”.