A 10 años de la noche del gas pimienta: el "Panadero" no se arrepiente
Se cumple una década exacta de una de las noches más oscuras del fútbol argentino: los jugadores de River fueron atacados por la 12 antes de jugar el segundo tiempo en La Bombonera. El encuentro fue suspendido y el Millonario se quedó con el triunfo por escritorio.

- Volanta: Superclásico
El Superclásico de Copa Libertadores 2015, en el que River y Boca definían el pase a los cuartos de final, terminó suspendido por un ataque con gas pimienta a los jugadores millonarios cuando regresaban del vestuario al campo de juego para disputar el segundo tiempo.
El responsable de aquel episodio fue Adrián Napolitano, conocido como el "Panadero", quien hoy, diez años después, sigue sin mostrar señales de arrepentimiento.
"Yo me inmolé por Boca y no me arrepiento. Es lo mismo que sepa que van a entrar a robar a mi casa con mis hijos adentro y me quede de brazos cruzados sin hacer nada. El tiempo me fue dando la razón, pero ya está, ya pasó. Nunca quise hacerme famoso y siempre preferí resguardar a mi familia", declaró recientemente Napolitano en diálogo con TyC Sports.
Cómo vive su día a día el Panadero
El Panadero, quien fue protagonista absoluto de aquella noche en la Bombonera, se mantiene en el más absoluto bajo perfil, dedicado a su panadería en Valentín Alsina. Aunque asegura que su vida volvió a la normalidad, admite que durante mucho tiempo sufrió el rechazo incluso en su propio barrio. Hoy, en cambio, la gente que lo cruza en la calle ya no lo señala, y en el barrio volvió a ser "el Tano", el que hace el pan y habla de Boca.
A pesar de haber cumplido con la probation que le impuso la Justicia, ayudando en una parroquia de su zona y colaborando con entidades de bien público, el episodio sigue pesando en la memoria colectiva de los hinchas. Aunque él sostiene que el tiempo le dio la razón: "Nunca quisimos suspender el partido, era sólo meter presión y se fue de las manos", sostuvo.
Lo que pasó ese día en La Bombonera
La escena en la Bombonera fue caótica. Mientras River regresaba al campo, una facción disidente de La 12, liderada por Napolitano, logró infiltrar gas pimienta a través de una rendija en la manga. Las imágenes de Leonardo Ponzio, Funes Mori, Driussi, Vangioni, Martínez y Kranevitter con quemaduras en los ojos y el cuerpo recorrieron el mundo, dejando una mancha imborrable no solo para Boca, sino para el fútbol argentino en general.
El partido fue suspendido más de una hora después de los incidentes y Conmebol dio por ganador a River por 3 a 0, fallando en el escritorio. River, que había ganado 1-0 la ida con gol de Carlos Sánchez, avanzó a cuartos y terminaría consagrándose campeón continental meses más tarde